Cuando llegue el momento, no me pienses como alguien que vivió, si no como alguien que intento. Ahogada en un vaso lleno de lágrimas y sudor, pintando sonrisas en mi cara y dibujando brillos en mis ojos. Así nací, así morí.

Dañada estoy, y cada día cuesta más y mas encontrar la pieza que tengo q reparar. Porque supongo que si fuera el corazón, no existiría, pero late entonces significa que funciona. De alguna extraña manera funciona.

Harta de acumular, harta de vos, de mí y de un tal vez. Agotada de tus humores, tus histerias y pasiones. Harta de que me guste el veneno que hay en vos. Cansada de mí me descubro entonces, y mientras más escribo llego a la conclusión de que el problema siempre lo tuve yo.

Te tendría que haber dejado morir solo, sin compasión. Tendría que haber seguido mientras podía. Pero no lo hice y ahora como casi siempre, es tarde. Busco arrepentirme y mandarte a la mierda, pero acertaste, no puedo. Me hundís.

Lo tengo todo, lo que quiero. Quien me puede parar si yo ansío tener algo. Vos, solo vos. Por que de todo tengo, menos lo q quiero. Adivina.

Ojalà nunca caigas como yo, aunque te lo deseo. Pero ojalà te puedas volver a pegar, y no como yo que estoy quebrada, inventando un ser humano que no existe hace ya mucho tiempo. Ojalà que nunca tengas que fingir felicidad ante los demás, pero por sobre todas las cosas ojala que algún día sepas quien carajo sos. Yo no